Abrazo entre Razón y Emoción
Hablar el lenguaje del corazón es un idioma sutil que llega a conmover con su ternura y dulzura. No entiende de distancias que pueda imponer la mente y lo racional con su capacidad de categorizar, clasificar, juzgar y tomar criterio.
Habilidades Hard y Soft
Sí, la razón y la inteligencia son unas herramientas muy útiles para encontrar maneras válidas de funcionar. Habilidades “Hard” o fuertes que catalizan procesos.
Pero no somos máquinas, ni robots. Somos humanos. Lo que nos hace humanos se complementa con esas habilidades “Soft” o suaves que dependen de nuestro corazón y emociones. Donde la intuición, la comprensión, la empatía, la escucha y la compasión nos hacen practicar acciones y conductas con valores. Esas capacidades de imprimir huella en bondad, en ética, en sentido humano de beneficio al prójimo.
La vida profesional del futuro
Así Eva Collado Duran en su nuevo libro nos sugiere un mapa de las competencias del trabajador del S.XXI con una combinación de estas habilidades Hard y Soft primordiales.
Valores que se pueden desarrollar y aprender a aplicar en cualquier momento. Howard Gardner, referente en las inteligencias múltiples, opina que para ser buen profesional es necesario ser buena persona.
En la vida personal como aprendices
Con actitudes en positivo y con la realidad como espejo, Albert Espinosa nos habla como se puede ser feliz cada día. Donde cada pérdida signifique una ganancia a través de un duelo bien transitado.
Todo es posible cuando caminamos como aprendices por la vida. Nuestra esencia reside allí, en nuestras conductas y acciones.
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Mireia Bosch Tello 